Es curioso que justo hace un año (coincidiendo con el frío de enero) abordé, con la ayuda de una toalla, estar conectada subiendo los brazos y girando el torso.
La coincidencia es que en esta época del año mi swing se desajusta. Mi cuerpo está más quieto, se vuelve perezoso y los brazos se adueñan del movimiento.
Este curso estoy trabajando en ejecutar un buen backswing, basado en las sensaciones que me transmitió Chegun y no restringir el giro (swing de senior).
Amaestrar otra parte del cuerpo para subir compacta, es el objetivo que me ocupa. Lo hice con el torso que ilumina la pared lateral, indiqué el camino que debería hacer al brazo derecho y mostré la posición de brazos enfrente del esternón con el magnífico ejercicio de la L.
Voy a seguir por el mismo camino, domando partes de mi cuerpo para hacer una correcta subida y en esta mejora, le toca al codo derecho.
En el swing, visualizamos la subida y a mitad de la bajada con los siguientes ejercicios.
Takeaway y a media subida
Lo primero es interiorizar cómo está nuestro cuerpo. Para ello no necesitamos al palo.
Aquí el profe, hace un ejercicio (minuto 2′) para empezar a trabajarlo delante de un espejo y observar el codo derecho pegado al costado.
Las imágenes también nos indican que el gran propósito que tenemos en el backswing, de mover el tronco conectado con los brazos, se cumple.
Tope del backswing y a mitad de bajada
No cabe duda de que en el tope del backswing el codo se despega del costado y un buen tip nos lo dan a continuación,
Poner el codo derecho en el tope cómo si sujetáramos una bandeja y en la bajada llevarlo al ombligo.
Esta imagen la estoy teniendo muy presente cuando quiero pegar unas buenas maderas 😉
Me he dado cuenta de que cuando pego a la bola, bajando brazos sin previamente bajar el codo al costado, las doy rastreras. Así que con este tip voy a terminar con uno de los errores que más me sacan de juego 😉
El tip anterior también beneficia al juego corto,
Para el Approach
Empecé a saber a ejecutar buenos approach, gracias a un amigo que me dio el mismo consejo ya hace una década 😉
Para el Bunker
En pierde el pulso y la bola sacarás, mostraba que si relajaba la parte derecha, con el codo pegado en la subida y bajaba con la idea de perder un pulso (o lo que es lo mismo el codo derecho hacia adentro), la bola desde la arena salía suave y controlada.
He demostrado que un ligero cambio del codo derecho puede beneficiar mucho a nuestro golf.
Mejorar es cambiar; así que para ser perfecto hay que haber cambiado a menudo.
Winston Churchill
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