El golf tiene un componente que lo hace más atractivo que otros a deportes, que es conocer entornos donde se practica. Juegues bien o mal, el disfrute ya lo tienes asegurado.
Me he llevado una grata sorpresa al conocer el Golf Logroño. Muy cerca de la capital y en un paraje (La Grajera) donde la vista se pierde en el horizonte.
Es un campo de los que yo considero «campazo» con calles anchas, bien cuidado y greenes de gran tamaño con caídas considerables (que no las aprecia el ojo a primera vista).
Cada hoyo es diferente y para muestra la pared vertical para llegar al green del hoyo 7 o la salida, casi de vértigo, desde caballeros en el hoyo 11.
Se ven bien los trazados de las calles y los tiros a bandera, excepto en el hoyo 15 en el que os aconsejo asomaros un poco hasta divisar por donde tirar con el segundo golpe. La sorpresa es la parte izquierda con maleza, donde seguro que ni se encuentran las bolas.
Desde rojas no es un campo largo y se llega a green en muchos hoyos en regularidad. Así que se puede ser «un campazo» y no ser excesivamente para pegadores 😉
Os pongo los dientes largos con la panorámica del campo,
Las calles son movidas como se aprecia en las fotos y eso te permite aprender a jugar con stances diferentes.
Cómo he comentado el campo es variado, por lo que te encuentras algún barranco y algo de agua.
Pero mi recuerdo, es de un campo abierto, divertido, exigente en los green y que se disfruta.
Quizás para mi el hoyo más difícil es el último (de hecho es el hándicap 1). El barranco es bastante ancho y el green esta rodado de bunkers que es fácil que te atrapen antes de coronar.
En mi partida iba Valentin (experto en juego corto) y Amador (de los más pegadores de hierros senior que conozco). Así que me esmeré e hice 37 puntos y con un fallo en el hoyo 2 al no esperar un green tan rápido que me costo 4 putts y una raya.
Gracias a Mati y a Julia, que me han dado la oportunidad de hacer esta escapada y al grupo entero que me acogió con mucho cariño.
Lo he pasado genial, son unos jugones de primera y no sólo de golf, también le dan al mus y a los pinchos de la calle Laurel 😉
Continuaré con la escapada y en el próximo episodio Izki.
Matilde Ramirez Ustariz
Que artista eres, fenomenal crónica esperando los siguientes campos
Roberto
Una sorpresa agradable está descripción de unos días entre amigos jugando al golf en La Rioja. Gracias M.Carmen.
Julia
Me encanta tus comentarios, lo hemos pasado fenomenal.